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El director de cine argentino Mauro Andrizzi se trasladará a la región de China durante el próximo mes de mayo con la intención de rodar “Una novia de Shanghai”. El rodaje de esta película en tan exóticas localizaciones contará la historia de la pareja protagonista, un par de vagabundos en Shanghai que deberán superar una carrera de obstáculos para trasladar un ataúd robado en un cementerio. La película contendrá referencias a la cultura china y su forma de tratar a los difuntos, así como un cruce entre la presión de la modernidad en las costumbres más tradicionales del milenario país.
El cineasta Mauro Andrizzi viajará el próximo mes de mayo a tierras chinas para rodar su próximo proyecto: “Una novia de Shanghai”. En esta ocasión, la película será realizada gracias a una beca otorgada a Andrizzi por una institución cultural chino- suiza, por lo que el director pasará seis meses alojado en el histórico Peace Hotel de Shanghai, donde dará forma a la preproducción de la película. El director formará un equipo de técnicos de origen chino, y contará con actores locales y la actriz Lorena Damonte (“Mar de plata”), la única actriz argentina que participará en el proyecto.
Con “La novia de Shanghai” el director de “En el futuro” y “Accidentes gloriosos” pretende hacer una comedia al estilo de las “screwball comedy” américanas, un género que surgió en los años 30, pero que es muy popular en las comedias venidas de ese país y que se caracteriza porque los personajes acaban en situaciones de lo más rocambolescas e inverosímiles, lo que produce la risa e hilaridad en el espectador.
La historia de la película girará en torno a dos chatarreros y vagabundos que viven en las calles de Shanghai sobreviviendo juntando basura y desperdicios recogidos de los barrios de la ciudad, cuando por caprichos del destino se ven obligados a cruzar la megalópolis con un ataúd y un cadáver robado de un cementerio para poder unir a una pareja de amantes más allá de la muerte, lo que dará pie a varios enredos y momentos la mar de absurdos, como ser perseguidos por la policía, o tener que defender su preciado ataúd de unos borrachos que pretenden robárselo.
Una cinta cargada de humor debido a la forma de tratar el complicado tema de la muerte y el contraste entre las costumbre y tradiciones milenarias de la china más conservadora, y la forma de vida posmoderna de una ciudad tan cosmopolita como es Shanghai.
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La exploración de estos contrastes en la cultura china es el principal interés de Andrizzi como director, y una de las condiciones por la que obtuvo esta beca, plasmar como se manifiestan en distintas costumbres y formas de vida el tratamiento a la muerte, en este caso, y como los chinos se amoldan a la modernidad pero manteniendo sus tradiciones más preciadas, como comentaba el director de esta comedia negra: “la película tendrá muchas referencias a la cultura china de los muertos. Además describe el cruce de la modernidad y las tradiciones ancestrales, y muestra cómo el capitalismo afecta a algunas costumbres. La China moderna es una mezcla de eso, del futuro con el acervo cultural milenario”.
Andrizzi ha estado trabajando en el guión y la producción del film desde agosto del 2013 y piensa mantener, como en sus anteriores rodajes una linea de producción independiente, con un equipo técnico y artístico reducido, algo que espera le de el máximo de libertad posible.