¡He encontrado al padre de mis
hijos!!!
Con ese bombazo nos saluda mi amiga
Laura ayer al llegar al bar.
Mis otras dos amigas y yo, que en lo
que la esperábamos íbamos por la segunda caña,
nos quedamos calladas más segundos de los que se considerarían
políticamente correctos, y con mi tendencia a la fantasía,
mi mente se transporta a una de esas telenovelas venezolanas, y me
pongo a pensar : ¿ Cuando ha perdido esta al marido?
¿Marido? ¿ qué
marido? SI NO TIENE!! NI hijos tampoco!
Por lo que enseguida atamos cabos, y
nos damos cuenta que se refiere a que ha encontrado al hombre
perfecto, ese con el que quieres formar una familia, y nos
apresuramos a cantarle: ¿ y quien es el? ¿ en que lugar
se enamoro de ti?
Pero esa frase se me quedo clavada en
el subconsciente, “El padre de mis hijos”...
Hasta el momento ninguna de nosotras se
había planteado la posibilidad de tener hijos, porque entre
otras cosas HIJAS éramos nosotras!!!!
Y Madres ... madres eran las nuestras,
con sus cosas raras de madres.
Apenas controlamos nuestra vida, como
para controlar la de una criatura... y es entonces cuando Ana me saca
de mi ensoñación: “Mi madre me tuvo a los 23”
Y a mi a los 25, pienso, y hemos pasado
esa edad con creces.
¿Es que estamos menos preparadas
que nuestras madres? ¿ como es posible que nos sintamos tan
alejadas del concepto Hijos, o nos suene a extraterrestre?
“Nuestras madres eran unas
inconscientes!!!” - les suelto a bocajarro a mis amigas – “solo
pensar como hemos salido nosotras” – y algo de razón
tengo.
Raquel, a la que podríamos
considerar la “bohemia” del grupo, por no decir otra palabra
apuntaba: “ si yo ya tomo ansiolíticos, si fuera madre no se
como sobreviviría”
Le doy un abrazo a mi amiga Laura, y
una caña, y espero que se le pase, después de todo,
encuentra al padre de sus hijos 3 veces al mes, y le recuerdo que se
tome la píldora. Por si acaso.