MADRE DE DÍA: La sororidad del cuidado en la crianza por mujeres

La crianza respetuosa: madre de dia requisitos

La sonoridad es ese pacto, ético y emocional entre mujeres que han construido para tratar de juntas, ser más fuertes y encontrar ese empoderamiento a través de esas alianzas, tratándose como hermanas (hermandad- sisterhood) y no como competidoras creando así una relación fundamentada en el cariño y nuestra valía como colectivo para crear un auténtico cambio en la sociedad. Por eso es tan importante la crianza conjunta.

Así es como surge el concepto de MADRE DE DÍA requisitos , la que se puede encargar del cuidado, pero también de la educación conjunta y de manera integral de los pequeños, acompañándolo a crecer y a aprender sobre el mundo que lo rodea.

Va más allá del concepto que tenemos de guarderías o centros escolares, pues esto lo que hace es crear tejido social respetando los ritmos de cada pequeño a la hora de aprender y siguiendo sin presiones esa educación en forma de acompañamiento. Un compromiso de crianza como el que se da en la escuela activa de juego y aprendo, con una pedagogía activa y abierta, con un sentimiento real de escucha a las motivaciones de los pequeños.

Es volver a las raíces de la educación y compartir la experiencia como madre para crear una experiencia de formación basada en un conocimiento real y empírico del día a día en la enseñanza.

Parte de esa crianza respetuosa que trata a los niños como seres humanos con sus propias necesidades, sentimientos y derechos, por lo que promueve la autonomía de los mismos, les genera confianza y desarrolla una autoestima fuerte porque establece un diálogo. Partiendo siempre de la empatía, el respeto y el amor incondicional hacia los pequeños para reforzar los lazos familiares y los vínculos, así como fomentar la salud emocional.

PRINCIPIOS VALORABLES EN LA CRIANZA:

1. Validar y valorar los sentimientos y las emociones de los pequeños: Es importante gracias a la gestión de la inteligencia emocional, enseñarles a valorar y validar aquello que sienten, transitando las emociones. Aunque es algo dificultoso, intentemos escuchar de manera activa utilizando un lenguaje empático que no juzgue para darles la oportunidad de participar de sus sentimientos, siendo afectuosos y asertivos.
2. Fomentar la Comunicación asertiva para crear los pilares de una crianza respetuosa: La experiencia nos dice que los niños se enteran de todos, así que debemos evitar los gritos y por supuesto el castigo físico o incluso el abuso verbal o la invalidación de sus sentimientos. Deberíamos hablar del apego seguro tanto con sus padres como con sus cuidadores que forman parte de su vida y de su enseñanza. Involucrarte de esta manera en sus pequeñas preocupaciones, pues para ellos es un mundo.
3. Invitarles a ser seres autónomos: Saber que pueden contar contigo, que estás ahí mismo, pero dejando que tomen esas decisiones que afectan a su día a día y a su conducta, pudiendo solucionar los problemas que aparecen de manera autónoma e independiente, dejando que se equivoquen y aprendan del ensayo y error que es la vida. Generando de esta manera responsabilidad en ellos, sentido de la organización que puede servirles para enfrentarse a los desafíos de la vida adulta y tener éxito en su desarrollo. Todo es aprendizaje.
4. No olvidar poner límites: Aunque hablemos desde el respeto, el orden y los límites son necesarios para un buen desarrollo. Unos horarios, la aceptación de reglas para evitar futuras frustraciones, pues van a vivir en sociedad y el hecho de que hablemos desde la ternura no significa que caigamos en la anarquía y el descontrol. Algo que ayudara a los pequeños a entender también las consecuencias de sus actos.
5. Estar presentes: Esta sería la característica más importante. Es el objetivo de este tipo de crianza, que no sean un número, ni un ratio, ni tengan un tiempo determinado para la realización de las cosas. La integración y el estar juntos es primordial. Ese conocimiento, esa fortaleza en la relación, genera un espacio seguro donde crecer y donde desarrollar fortalezas como ser humano de manera saludable, fortaleciendo aún más el vínculo familiar.

Esto hace que el trabajo y cuidado de las madres de día sea además parte de la educación integral y del proceso evolutivos de los niños y niñas. Un acompañamiento verdadero y certero a la hora de aprender, pero también de jugar y crecer juntos. 

Donde la formación de las madres de día es muy importante, para unir esa parte de jugar y aprender, además de integrar el cuidado diario, que puede integrar disciplinas como la comunicación no violenta, aprendizaje basado en proyectos, pedagogía Waldorf, el conocido método Montessori, la pedagogía Pikler, o tener conocimientos sobre el empoderamiento y la diversidad.

M Canaria y Tenerife daban al Sol. Para nosotras representa la VIDA y el FUTURO: la INFANCIA.

La LAVANDA es una de las plantas aromáticas más valoradas por su belleza,
perfume y fines medicinales. Representa el  CUIDADO.