El cine español mola. Esa es la palabra, mola. Podríamos decir que goza de buena salud, que es potente, que tiene talento, o que las nuevas generaciones con proyección internacional dan buena cuenta del talento de nuestro país, pero es que no hay otra palabra que lo defina mejor.
Tras el guión de las dos primeras películas de Bayona se encuentra Sergio G. Sánchez, alguien que también ha firmado libretos tan potentes como palmeras en la nieve o “Fin”, y que se ha lanzada a la dirección con esta película: El secreto Marrowbone, su opera prima.
La historia nos narra las peripecias de una madre que con sus cuatro hijos decide trasladarse desde Inglaterra a Estados Unidos perseguidos por un oscuro y trágico secreto.
Allí, los jóvenes, totalmente aislados y desplazados encontrarán en la encantadora Anya Taylor - Joy ( múltiple, o la bruja) una buena amiga, y un islote al que aferrarse en esos momentos de soledad y marginación.
La muerte de la madre enferma, deja a los jóvenes a merced de las autoridades, que los separaran si se enteran de este cambio en su situación familiar. Lo peor de su situación no es mantener el secreto. Es hacer frente a un ente maligno que acecha en la casa.
Nadie sabe cual es la clave para triunfar en el terror o cual será ese giro que nos haga saltar de la butaca, y en este caso nos inquieta cual ese secreto que esconde la familia Marrowbone. Coquetea con el terror Gótico de desván que ya vimos en “flores en el ático”.
Entonces conoces a Sergio y te conquista, te hace participe de la historia, de lo majo que es y de su pasión y bondad, y te lo quieres llevar a casa sin remedio.