Pasamos la mañana en el festival
de cine de Cinema Jove con Nacho Vigalondo, que viene a realizar un
encuentro con el público además de promocionar su nueva
película Open Windows.
Vigalondo llega con sus gafas de sol y
muy hablador, dispuesto no solo a repetir los discursos de siempre
sino a hablar de actores y de cine. Antes de empezar nos recuerda
como Cinema Jove, fue su primer NO festival, aquel al que envío
su primer corto, y NUNCA fue seleccionado.
Nosotros nos adelantamos y cogemos el
micro los primeros para preguntarle por ese METACINE, esa película
dentro de la película y haciendo un juego con el film mismo, y
los primeros minutos que pudimos ver durante el festival de cine
fantástico Nocturna, le preguntamos cuanto hay de él en
la dirección de Open Windows, y cuanto de Richie Gabilondo,
este director sobrado y prepotentes que él mismo interpreta en
la película.
En este inicio de película nos
plantea un juego donde podemos encontrar a Raúl Cimas, y
Carlos Areces, dentro de la falsa película que es Dark Sky.
Vigalondo nos relataba ante la pregunta
de qué porque no habíamos podido ver el film en estreno tanto
en Cinema Jove como en el Nocturna, que las fechas de estreno estaban
muy cercanas a la de los festivales, y que tan solo habían
estado presentes en Cannes, con una versión para
distribuidores, y en el festival de Austin.
Ante esta multitud de ventanas al
mundo, y de ventanas virtuales como es “Open Windows” es
inevitable ver el trasfondo de Hitchcock y todo el lado psicosexual
que envuelve el mirar sin ser visto, y la multiventana y pantalla
partida tan propia de Brian de Palma, algo que personalmente nos
gusta mucho y nos recuerda a esas comedias de los 60, en el típico
momento en el que hablaban por teléfono o iban en un taxi y
la pantalla se dividía.
“Open windows es como un plato de
spaghettis recalentado por segunda vez”, nos decía
Vigalondo, en una frase que él mismo ha acuñado. En
esta ocasión copia, como no puede ser de otra manera pues ya
esta casi todo inventado, a Brian de Palma, que ya a su vez copia a
Hitchcock, por lo tanto su obra finalmente es un refrito de un frito,
enmarcado en los nuevos tiempos. Es algo actual, pero también
clásico, ya que el recurso de la pantalla partida, en un
thriller resulta tremendamente divertido.
La pregunta inevitable y obligatoria es
preguntarle por los actores, y como de divertido u horrible es
trabajar con Elijah Wood, alguien que parece haberle tomado gusto a
eso de la producción, y podemos ver su nombre en los créditos
en multitud de obras de cine indie, sobretodo de género, y que
se ha dado tanto a trabajar con directores españoles como
Eugenio Mira, en “Grand Piano” o Alex de la iglesia en “Los
crímenes de oxford”.
Vigalondo nos contaba, que Elijah es
alguien con quien da gusto trabajar, que a pesar de que podría
aplastar nuestras carreras con su dedo meñique, al final de la
grabación se sabia quien era quien y llamaba a todos por su
nombre, desde las maquilladoras, hasta el chico del catering.
Trabajando con alguien así, y viendo como se vive en una
sociedad donde hay tanto clasismo en el mundo del cine, te das cuenta
de Elijah es una de las personas más desprendidas posibles.
También interrogamos al cineasta
sobre su opinión de las plataformas VOD, o los estrenos
multiplataforma, como cuando Paco León estreno su film,
Carmina o Revienta, por tierra, mar y aire, o lo que es lo mismo, en
cines, venta en DVD y en on-line de la misma forma. En este caso nos
contaba que con Extraterreste, su anterior film ya había
tenido la oportunidad de hacerlo así, y que es algo habitual
en USA, pero no en el cine Europeo, que todavía tiene otra
mentalidad.
Que estos estrenos multiplataforma le
habían permitido aproximarse a películas como Cheap
Threalls (recomendamos totalmente este film de torturas) o a A field
in England lo nuevo de Ben Wheatley, que pudimos ver en Sitges 2013,
y a mi me dejo loca, pero para mal, encima se me quedo la cancioncita
grabada durante días. Además siempre que nombran a ese
director pienso que es el actor de American Beauty, sí, el de
la bolsa, y me hago la cabeza un lió, pero esto ya son
historias mías.
Seguimos con lo que nos contaba
Vigalondo, que en este caso era, que sigue siendo un Tabú
pagar por ver cine en el ordenador, es tan español lo de
querer las cosas gratis. Que exista esta manera de ver cine online y
gratis, no hará que el cine desaparezca, ya que los grandes
blockbusters y el cine más mainstream seguirá teniendo
público en salas, pero será ese cine mas independiente,
con menos medios, y en definitiva, el que más lo necesita, el
que pagará las consecuencias.
Seguirán habiendo grandes
pantallas, pero en casa, y será difícil explicarles a
los niños, como si fuera una escena de Mad Max, como era la
experiencia colectiva de reunir a 200 personas en una sala, y reír
o gritar a la vez. Esa impronta que solo el cine en colectividad da.
También era inevitable
interrogar al autor sobre lo que más morbo da en la película,
y también más juego: Sasha Grey.
Vigalondo nos contaba que había
una lista de actrices propuestas por la productora, pero que al ver
el nombre de Sasha le pareció que seria lo más
divertido, porque es una “explotación” de si misma, de su
nombre y su personaje, y creaba un juego entre lo real y lo
imaginario. La propia Sasha Parecía un eco de su personaje en
la película, y que hubiera sido inventado para ella.
En esta ocasión, cuando le llego
el encargo / propuesta de realizar este film, que podría ser
el más raro de la historia del cine, se le proponía
hacer una película con el lenguaje de internet, en el que
finalmente desaparecieron las redes sociales, y gano protagonismo el
ordenador y sus múltiples ventanas sin hacer alusión a
ningún programa especifico pero todos totalmente reconocibles.
También nos contaba como los
videojuegos, y esa afición había condicionado su cine,
tanto de manera positiva en esta película, como en otras, pero
como también nos quitaban horas de vida y de realizar otras
cosas. Algo en lo que estamos totalmente de acuerdo, ya que si esas
50 o 60 horas enfocadas a “pasarnos” un videojuego, las
hubiéramos dedicado a realizar películas, mirad si
tendríamos más obras maestras.
Pero mejor si lo veis, que si os lo cuento.