Son las 10.30 de la mañana, y
¿Donde acabamos nosotros?, viendo Machete Kills.
Aunque no he visto la primera, tenemos
que decirlo, disfrutamos con la segunda, porque nos lo tomamos como
debía de ser: como una fiesta.
Empezar como un falso trailer y acabar
en un film es la excusa para ver cameos de multitud de actores y una
historia sin pies ni cabeza donde lo único que importa son las
persecuciones y las escenas de acción.
Así que tenemos a Danny Trejo
matando a un montón de gente, y ya esta, serie B cutre y
deliberada que nos va a encantar, como una montaña rusa
cargada de dinamita.
Robert Rodriguez se rodea de amiguetes
y de esa fiesta sale una película, ¿y porque no?
Si la próxima es en el espacio,
conmigo ya tienen un espectador ganado.
Seguimos, y nos saltamos el almuerzo
por una buena razón, el remake americano de una película
de una familia de caníbales: We are what we are
Una pequeña comunidad del estado
de Nueva York, semi escondida, y rural, como suele acontecer en este
tipo de films, es el marco para que el horror más cotidiano se
geste en el seno de una familia cualquiera.
Una familia que trata de cuidarse a si
misma, donde las dos hijas más jóvenes sienten
repulsión ante lo que hacen, pues tras un ayuno voluntario y
cuidadoso, deben preparar a conciencia un festejo alimenticio, donde
cocinarán y servirán, a uno de sus vecinos, que
previamente han secuestrado y tenido cautivo en el sótano.
De manera muy cerebral, se nos
presentan a estas jóvenes horrorizadas con lo que tienen que
hacer, pero sin poder evitarlo, ya que al fin y al cabo, “Son lo
que son”.
Un retrato perturbador de las
tradiciones ascentrales, frente a la extinción, no solo de
estos ritos, sino también del concepto de familia.
Un american Gothic que retrata el
oscuro corazón de la América más profunda, no
tan alejada de la ficción.
Hoy no comemos, no pasa nada, porque la
niña que hay en mi, la que con 14 años disfrutaba con
Buffy la cazavampiros, esta feliz y retoza de alegría porque
el actor Nicholas Brendon esta en el festival.
a mi me daba igual que dijera que se queria ir al baño, o huir... yo no me separaba |
esta señora me mira mal, pero la fan de buffy puede morir en paz tras esto |
Vemos “Coherence”, una película
de ciencia ficción en el festival, y ocurre que durante los
primeros minutos estoy tan nerviosa de saber que esta el actor en la
sala que no puedo enterarme de nada, mi cabeza se nubla y solo piensa
en que cuando los créditos aparezcan en la pantalla, saldré
corriendo como una posesa a encontrarme con él.
Así ocurre, cuando el pobre solo
puede articular en un ingles, que por supuesto no entiendo que tiene
que ir al baño, yo le abrazo más.
He perdido la cabeza señores.
nosotros en coherence somos de la casa azul |
“Coherence” se convierte en uno de
los películas del año, y una de las películas
más valoradas y que nos encantaron mas.
Partimos de la premisa de que las
posición de los planetas podría determinar la
personalidad, por lo que el paso de un cometa podría hacer que
en la tierra ocurrieran ciertos cambios extraños.
En Finlandia durante 1923, el paso de
un cometa trastoco la vida de los habitantes de una pequeño
pueblo, hasta el punto de pensar que la persona que tenian al lado no
era la que debía ser.
Este cometa vuelve a pasar en el
momento en el que un grupo de amigos se reúne para pasar una
hermosa velada cenando todos juntos, ¿ se repetirá la
historia?
Coherence es el debut de James Ward
Bykit, y reunió a un grupo de amigos para rodar en su casa y
en ocasiones sobre la marcha y con improvisaciones, para realizar una
de las películas sobre multiversos más interesantes de
los últimos años. Un film que apela a la inteligencia y
a la física cuántica más mundana, fresca y
espontanea.
De esta manera Bykit subraya la delgada
línea que separa la coherencia de la incoherencia.
Con “Kiss of Damned” tenemos la
dosis del vampiros del día además de recuperar a mi
siempre querido Milo Ventimiglia. Una producción que podría
ser metralla de videoclub con dosis de sexo y oscuridad gótica.
Una curiosa rareza dentro del género,
cercano al giallo light y un erotismo intelectualizado y perverso.
El don de la inmortalidad a cambio de
vagar en la oscuridad y beber sangre, dado por una vampira escritora
adicta a los videoclubs.
La hija de John Cassavetes, nos deja
una rareza, digna de los grandes mitos del fantastic.
A pesar de los éxitos cosechados
en multitud de festivales, “Possession” de Brillante Mendoza nos
pareció un bluff.
El filipino nos traía una
curiosa cinta sobre posesiones y como un equipo de televisión
se encargaba de grabarlo todo y seguir a los supuestos poseídos.
La rivalidad de dos cadenas de
televisión por la audiencia y el morbo, nos hace seguir a una
reportera en busca de carnaza, y el reportaje más sórdido,
dejando la ética de lado en todo momento.
Pero el diablo mete la mano en los
rincones, y toda la redacción acabará oyendo ruidos
extraños, viendo sillas que se mueven, y en definitiva siendo
victimas de este maleficio.
Entre la sátira y el escalofrío,
nos hace pensar que de no estar tan cansados tal vez la hubiéramos
disfrutado más, o no.
Por la tarde “Borgman” se convierte
en un ejercicio cinematográfico, que o amas u odias. Alex van
Warmerdam, su director aseguraba que con la edad, supongo que un poco
como todos, se estaba volviendo más maligno, y eso se refleja
en su cine. Como director, actor y productor en Borgman, tiene el
control total de la obra, y ha inyectado esta perversidad a su
personaje protagonista, que como una criatura del bosque, un
animalejo extraño, esta corroído por su propia
naturaleza bajo su apariencia calmada.
La calma de una familia de clase
media-alta, es alterada cuando un asesino buscavidas, encarnado por
Jan Bijvoet, llama a su puerta.
Junto a una cuadrilla de malvados
personajes, Borgman, pasa a dominar de manera sutil y poco a poco,
esta familia de diseño que pasa a ser un grupo de marionetas,
a merced de estos mercenarios sin escrúpulos, que no se sabe
muy bien lo que quieren.
Este tipo de películas, en las
que el mal por el mal, de manera más cotidiana te producen el
horror más profundo.
Un thriller domestico, lleno de humor
negro, como una pieza de piano diseñada a la perfección
por ikea, para enfrentarnos a los limites de la perversión
humana.
Un terror psicologico, que esta en la
capacidad del espectador para imaginar la perversión de la
condición humana. Un horror, en cualquiera de los sentidos.
Durante el festival de sitges de este
año, vivimos uno de los momentos más importantes y
emocionantes de mi vida posiblemente, y es que es cumplir mucho más
que un sueño, ya que se proyecto uno de nuestros cortos
durante el festival.
Hace un año, cuando conocí
al que es el amor de mi vida, jamás pensé que al año
siguiente habríamos rodado una pieza y que seria elegida para
ser vista en el festival, nunca nos imaginamos poder sentirnos tan
afortunados.
Así es como nuestro corto “I'm
a ghost” se pudo ver en el Brigadoon de sitges.
Si no pudistéis acompañarnos durante la proyección del corto no pasa nada, ya que lo grabamos todo.
Lo más emocionante fue ver como la gente se reia justo en las partes en las que debía reirse, aunque no lo entendieran todo.
Nos hizo muy felices.