En esta ocasión quiero
hablaros de maría y los demás, la opera prima de nely
reguera, que se presento en la sección nuevos directores del
festival de san sebastian.
Cuando se estreno no
culpes al karma de lo que te pasa por gilipollas se la llamo la
bridget jones de malasaña, y es una pena que se haya
estrenado antes, pues la verdadera bridget jones, es maria y
los demás
Esta maria si que es una
bridget treinteañera, perdedora, alocada y ensoñadora, que te
provoca ternura y vergüenza ajena a partes iguales.
Maria, nuestra
protagonista, ha cuidado de su padre y de toda su familia desde que a
sus 15 años su madre falleció Es una joven responsable y
controladora que ha sido siempre el pilar de su familia y se siente
muy orgullosa de eso.
Pero el día que su padre
anuncia a la familia que se ha enamorado de su enfermera y que se van
a casar, la vida de maria se desmorona.
Con 35 años, sin novio a
la vista, y sin haber cumplido sus sueños se siente perdida.
Queréis conocer a esta
maria??
Yo sin duda os digo que no
os la podéis perder. La Maria de la peli esta interpretada por
Barbara lennie, que si de normal se come la pantalla, aquí lo
borda, pues maria es maniática, soñadora, divertida, atolondrada, y
melancólica a partes iguales.
Nely reguera, en
esta que es su opera prima, nos cuenta una historia sencilla, con un
humor tremendo, basado en la naturalidad y la cotidianidad de las
acciones.
Es una película
totalmente generacional, es decir, de nuestra generación. De
treinteañeros, que no nos hemos casado, que cada vez tenemos los
hijos mas tardes, que las aspiraciones laborales no se han cumplido y
que estamos tan perdidos como la Maria del cuento.
Esta perfectamente
compactada entre la comedia costumbrista, y el melodrama sutil.
Plagada de esas comidas y encuentros familiares que son los que crean
los dramas y tensiones cotidianos.
Maria habla de toda esta
generación que siente que se le ha pasado su tiempo, y que su vida
no es como debería ser.
Nuestra maria/barbara, se
siente estancada escribiendo una y otra vez una novela, que es su
vida misma, y cuando por fin lo consigue, ese tren ha vuelto a pasar.
Pero el film no solo se
ríe y llora claro, con esa Maria, sino también con los demás Con
el cuñado pesado, con el hermano que parece que ha triunfado en el
extranjero pero no, con la hermana embarazada que parece que tiene la
vida perfecta y es un quiero y no puedo.
Son un poco un pedacito de
todos nosotros, con ese poquito de miedo que a veces nos impide
vivir, o terminar las cosas. Maria no acaba la novela, ni esa
relación enfermiza que no va a ningún sitio.
Maria tiene miedo a vivir,
y se aferra al rol que ha llevado durante años, es decir, el hacer
de madre de todos, en lugar de hija.
Lo mejor de Maria, son sus
ensoñaciones, es decir, todas esas emociones secretas que ninguno
confesamos. Su deseo de triunfar, y dejarlo todo, sus aires de
grandeza, y las envidias, esas que son tan naturales y no nos
atrevemos a confesar.
Maria se ríe de todo y de
todos, y primero de ella misma.
Vais a ver a una barbara
lennie como nunca, divertida y alocada, pudorosa, y con tantos
registros a la vez que no nos extraña que la película este nominada
a dos premios feroz, incluidos el de mejor película en comedia, y no
nos extrañaría tampoco que se los llevara.
Acercaros a esta comedia
alocada con un trasfondo muy real, que se ríe de si misma y de
nosotros de manera sana y audaz.
Porque maria es barbara
lennie, pero los demás somos todos.