La 62 edición del
Festival de San Sebastián que se celebrará en el mes de
septiembre presentará la retrospectiva de este año, que
se llamará Eastern Promises – Retrato de Europa del Este y
que con 50 películas rendira homenaje al cine producido desde
el año 2000 hasta la actualidad en los países que
vivieron bajo la influencia soviética tras la II Guerra
Mundial. Además el festival rendirá homenaje a Dorothy
Arzner, la única mujer que consiguió hacerse una
carrera profesional y triunfar como directora en la época
dorada de Hollywood.
El ciclo de películas
Retrato de Europa del Este, permitirá descubrir la riqueza
creativa de esas cinematografías y acabar con prejuicios e
imágenes estereotipadas, y acercarnos a la realidad de esos
países. En el 25 aniversario de la caída del muro de
Berlín las 50 seleccionadas en el ciclo serán entre
otras: “No Man's Land /En tierra de nadie”(2001) de Danis
Tanovic,” The Blacks “ (2009) de Goran Dević & Zvonimir
Jurić, “Children of Sarajevo” (2012) de Aida Begic, “The
Parade” (2011) de Srđan Dragojević, “How I Killed a Saint”
(2004) de Teona Strugar Mitevska, “The Temptation of St. Tony”
(2009) de Veiko Õunpuu, “Cooking History” (2009) de Peter
Kerekes, “The Wild Bees” (2001) de Bohdan Sláma, “Hukkle”
(2002) de György Pálfi, “The Death of Mister Lazarescu
/ La muerte del señor Lazarescu” (2005) de Cristi Puiu,
“12:08 East of Bucharest / 12:08 al Este de Bucarest” (2006) de
Corneliu Porumboiu.
Retrato de Europa del Este,
será una retrospectiva que reunirá un total de 50
películas provenientes de Albania, Bosnia, Bulgaria, Croacia,
Eslovaquia, Eslovenia, Estonia, Hungría, Letonia, Lituania,
Macedonia, Moldavia, Polonia, República Checa, Rumanía
y Serbia, muchas de ellos inéditas en España, y
permitirá lanzar una mirada critica al cine que se ha seguido
haciendo en esos países a pesar de que han sufrido cambios
políticos y geográficos, guerras, y cambios de
regímenes económicos que a su vez han provocado
cambios sociales.
Todo un nuevo imaginario para
el espectador actual: films con temática social y política,
recreaciones históricas de los hechos acontecidos en la Europa
de los últimos años, y nuevos paisajes humanos y
territoriales se darán cita en esta retrospectiva.
En la 62 edición de
Zinemaldi, además se rendirá homenaje a Dorothy
Arzner, un caso único en la historia del cine americano, al
ser la única mujer que consiguió hacer carrera
profesional como directora en la época dorada de los grandes
estudios de Hollywood. El festival homenajeara a esta pionera por la
integración de la mujer en la industria cinematográfica
y reivindicará su estilo y personalidad propios los cuales le
valieron el prestigio dentro de la industria.
Criada en Los Ángeles,
desde pequeña Arzner había estado en contacto con la
industria cinematográfica, ya que sus padres eran propietarios
de un café frecuentado por los actores y directores más
celebres de la época: Charles Chaplin, William S. Hart o
Erich von Stroheim. Pero no fue hasta el encuentro de la joven con el
director William C. DeMille (hermano del célebre Cecil B.
DeMille) cuando esta conductora de ambulancias reconvertida a
periodista decidió que quería ser directora de cine.
Fue en la sala de montaje
donde Arzner se ganó una excelente reputación en la
industria de Hollywood, trabajando en 52 películas. La joven
Arzner presionó a Paramount para que le dejara dirigir una
película, amenazando a los directivos del estudio con aceptar
una oferta de un estudio rival, y así fue como debuto en la
dirección con el film “Fashions for Women / La reina de la
moda” (1927) y al año siguiente se convirtió en la
primera mujer de la historia que dirigió una película
sonora, “Manhattan Cocktail” (1928), inventando incluso el
micrófono de jirafa al atar un micrófono a una caña
de pescar. Arzner dirigió 15 películas más a lo
largo de la década de los treinta y comienzos de los 40, y
trabajó con estrellas de Hollywood como Katharine Hepburn,
Maureen O'Hara o Joan Crawford en comedias y melodramas que prestaban
una especial atención a los personajes femeninos.
Aunque su nombre cayó
progresivamente en el olvido, la carrera de Arzner fue reivindicada
en la década de los 60 por los movimientos feministas y fue
objeto de varios homenajes, entre ellos el del Sindicato de
Directores de América en 1975, al que perteneció
durante décadas siendo la única mujer en el.
La retrospectiva que el
Festival de San Sebastián dedicará a Dorothy Arzner
estará organizada en colaboración con Filmoteca
Española, y el l ciclo se complementará con una
publicación sobre su figura y su obra.